Trabajando los alimentos, me di cuenta que algunos no sabían clasificar qué era fruta , o qué era carne o las tiendas respectivas donde se compraban. Así que se me ocurrió montar nuestras propias tiendas.
Simulábamos que ibamos a comprar y ellos colocaban dónde creían que encajaba cada alimento.
Un recurso que dejaremos de manera permanente en la clase y que desde un principio les ayudó a entender un poco mejor.